ESPAÑA Y EL REGENERACIONISMO
A principios del siglo XX España
tenía como principal objetivo regenerar el país tras lo acontecido en el
desastre del 98 en la guerra hispano-cubana. A pesar de que se veía a España
desde el punto de vista geográfico como una gran nación, las condiciones del
país no estaban a la altura desde el punto de vista político y económico.
Alfonso XIII |
Cuando el monarca Alfonso XIII subió al poder, el gobierno estaba en manos de Francisco
Silvela. El objetivo era crear unas instituciones de carácter político basadas
en la conversión de la realidad. Esto se
mantendría hasta el año 1903, cuando el gobierno se descompuso. En este mismo
año, tomaría las riendas Maura que se enfrentaría a graves comentarios de la
opinión pública que estaba en contra de sus políticas, especialmente las que
tenían que ver con el terreno religioso. Se sucedieron varios gobiernos conservadores y
liberales, pero siempre muy inestables, que no llegaban a consolidarse en el
poder. Toda la política regeneracionista supuso varios movimientos políticos
intentando llevar una posición contraria, mediante la movilización a la opinión pública
para llegar por otros caminos al poder.
En este punto surgen los nacionalismos, llevando a cabo varias transformaciones que se surgieron en siglos pasados y que pretendían sobre todo el cambio en la sociedad, en ocasiones de manera muy radical. El nacionalismo con más relevancia fue sin duda el catalán, que luchaba por un renacimiento cultural, por un estado federal y por el proteccionismo.
Francisco Silvela |
Durante el gobierno de Silvela, se fundó la Lliga Regionalista, así como años después se fundaría el diario La Veu de Catalunya por Prat de la Riba. Sin embargo, el gran acontecimiento llegaría en 1905 con los incidentes del Cu-Cut, lo que crearía la Solidaridad Catalana y haría que el sistema por turnos entrara en una gran crisis. Este objetivo catalán, no solo era para su territorio en concreto, sino que lo quería llevar a cabo en todo el Estado español.
Sabino Arana Goiri |
La situación era parecida en el País
Vasco, donde se intentó llevar a cabo una modernización económica, para poder imponer
sus propias ideas nacionalistas, y así poder avanzar en términos agrícolas respecto
a lo que estaba sucediendo en el resto del país. Los vascos fueron más allá, y
también se dio un renacimiento del terreno cultural y católico. Sin duda en
este nacionalismo vasco tuvo que ver en gran medida la figura de Sabino Arana
Goiri con un papel político determinante, no excluyendo en sus objetivos el
empleo de la violencia. Los nacionalismos también se pudieron apreciar en mejor
medida en Galicia y la Comunidad Valenciana, ya que no fueron tan radicales
como los vividos en Cataluña y País Vasco.
Para ampliar el concepto del
regeneracionismo, a continuación se van a explicar dos obras de un
contemporáneo de la época como fue Ángel Ganivet.
ÁNGEL GANIVET GARCÍA
Ángel Ganivet García |
Ganivet, nace el 13 de Diciembre
del año 1865 en la provincia andaluza de Granada. Fue sin duda uno de los
precursores del 98. A pesar de sus raíces españolas fue destinado a varios
países europeos, donde sin duda el que más le marco fue Finlandia. Las causas
de su muerte hoy en día aun son toda una incógnita. Apareció suicidado el 29 de
noviembre de 1898.
CARTAS FINLANDESAS
Ángel Ganivet, fue el gran
precursor de la generación del 98. Sus obras se caracterizan por un estilo muy
personal y en ocasiones una crítica a la sociedad. Entre sus obras se encuentra
“Cartas Finlandesas” (1896)
que sin duda es de sus relatos más importantes.
Este libro surge a partir de la
idea del granadino de querer contar a sus conocidos en España, como es la
tierra de Finlandia, no sólo en el ámbito geográfico, sino también desde la
perspectiva humana, de la situación de finales del siglo XIX. Sin embargo la
presencia de su país natal siempre ha estado vigente en el escritor “Muchas veces al volver a Granada después de
largas ausencias, he notado en mí al ponerme en contacto con el aire natal,
cierta alegría espontánea, corpórea, que me ha hecho pensar que no era yo quien
me alegraba, sino mis átomos al reconocerse”.
Realiza un balance por las
tradiciones y costumbres de las gentes del país nórdico a las cuales no llama
ciudadanos en ningún momento, sino indígenas. Establece un continuo diálogo
entre el territorio de su origen español y el finés. En todo momento se hace
llamar corresponsal, ejerciendo una inmejorable labor periodística para España
de lo que ocurre en Finlandia, tal y como podemos observar en las cartas que
componen el libro. Con esto se tiene conocimiento de lo que se piensa del
territorio hispano fuera de sus fronteras, y en qué aspectos se debe mejorar
como nación tanto a nivel individual por parte de los ciudadanos, como en su
conjunto como sociedad.
En la época en la que se
desarrolla y se escribe este libro, Finlandia era un condado de Rusia, no había
conseguido la independencia. El reinado estaba bajo el zar Nicolás II. El
movimiento que por aquel entonces se daba era el Neo-Romanticismo, que en todo
momento simpatizaba con el pensamiento independentista.
Ganivet, fue sin duda un español
inteligente y un pensador profundo, que desde su novela, logra influir en otros
escritores, y en los de su misma generación. Nombrado cónsul de España en Ámbares,
se le pidió que ejerciera su labor como profesional en Finlandia, ya que era un
territorio completamente desconocido para los andaluces y el resto de España.
Es por este motivo por el que se decide a escribir “Cartas Finlandesas”. Fueron
publicadas en el diario “El defensor de
Granada” de la provincia andaluza. Estos escritos son los únicos escritos
en lengua castellana sobre el país finés
hasta la actualidad.
Ganivet llega a familiarizarse
durante sus años de residencia en Finlandia con sus gentes. Describe con cariño
y sin prejuicios, siendo un objetivo ciudadano del mundo. Su estilo en un gran
número de veces es satírico, con dotes de arbitrariedad que responden “al modo de ser” de la sociedad y de sus
costumbres. Sin duda son aspectos novedosos para el receptor. En este punto hay
que destacar que el escrito carece de citas, números o textos con un gran
componente histórico, lo que hace que el lector pueda entender el libro sin
dificultades.
En las cartas que componen el
libro se le describe al lector un gran número de aspectos. Uno de ellos es como
son las elecciones en el país finés, donde el poder ejecutivo es realizado
satisfactoriamente y el poder legislativo será representado por un Landtdag.
Para llevar a cabo una correcta
transformación política, hay que crear sin duda un Estado social “Un pueblo culto es un pueblo libre (…) una
nación no debe vivir a día”. Sin embargo, a pesar de que Ganivet apuesta
por el sufragio universal para conseguir la limitación, no debería de votar
ningún ciudadano. Acepta todos los progresos que se están llevando a cabo, y se
siente orgulloso de haber nacido en España, sin embargo el mejor país gobernado
que ha conocido es Finlandia.
Los españoles desconocen las
características de los fineses, sin embargo en sentido contrario es totalmente
diferente, los fineses conocen a los hispanos y no precisamente por sus “buenas
hazañas”. En Finlandia se tiene una gran
consideración con las mujeres, se puede tener “amistad sin mezcla de otro sentimiento”. La idea que se tiene
sobre el español es de hombre con orgullo y con aires de “grandeza”. En este punto se comenta como las tradiciones españolas
están muy por debajo del pensamiento europeo
“un signo de atraso intelectual y las corridas como signo de barbarie”, por
lo que una vez se hace constancia del gran atraso que tenía España respecto a
Europa.
Otro de los grandes aspectos por
los que nos muestra su familiaridad, es a la hora de explicar cómo deben firmar
los fineses, o a que dedican su tiempo libre con los espectáculos que realizan
nocturnos, donde la más conocía es la Allegri-Lotteri.
“Este país es amante del progreso”, se
tiene principalmente en mente la extensión de la red de ferrocarriles, el
estado de las carreteras o el servicio de correos, antes que todos los aspectos
que tienen que ver con el ámbito sentimental de las personas como puede ser la
amistad. Esto son innovaciones de utilidad práctica, rapidez y perfección con
que el mundo asimila el progreso.
Sin duda para los nórdicos el
peor mal que le puede ocurrir a una mujer es nacer es España, debido al gran
atraso que tiene el país. La libertad brilla por su ausencia, las mujeres
españolas viven “encarceladas y
contentas, las juzgan como seres infelices, sin conciencia de su dignidad
personal”. De los españoles se dice que tienen un carácter peculiar “la dureza, la tiranía con la mujer, el
desprecio de las leyes y otros de este tenor, son el estribillo que se habla de
España”. Sin embargo todas sus conclusiones acerca de la sociedad, le
llevan a una profunda frustración sobre el fracaso del individuo. A pesar de
esta reflexión lo que más le atrae es el hombre, más allá de la naturaleza del
mismo.
Gracias a este libro, el lector
tendrá una imagen muy cercana acerca de la sociedad y costumbres de los
fineses, prácticamente como si hubiera sido él mismo, el que hubiera vivido
allí ejerciendo de corresponsal. Esto se consigue gracias a la veracidad de los
acontecimientos que se cuentan y a la fluidez con que se realizan las observaciones
por parte del emisor. El lenguaje empleado es fácil de entender por sus dotes
de naturalidad, que permite transmitir sensaciones al lector. Al mismo tiempo,
el receptor capta emociones propias de su particular visión del mundo, en este
caso de Finlandia, que es el país que se describe.
La opinión particular de Ganivet
acerca de Finlandia es dependiendo de la temática muy dispar a la que tiene de
España, en términos políticos. En este caso se queda con Finlandia a pesar de
que su progresivo materialista no le termina de seducir a su persona. Sin lugar
a duda, este escrito solo se pudo llevar a cabo porque Ganivet entendía a la
perfección Finlandia, y no sólo eso, sino que lo más importante es que la amaba
y respetaba profundamente.
Otra de las grandes figuras junto
a Ganivet es sin duda Miguel de Unamuno. Ambos tienen obras en las que se
encargan de hablar de la situación de España, En torno al Casticismo (Miguel de Unamuno, 1895) e Idearium Español (Ángel Ganivet,
1896). Son dos intelectuales que intentan cambiar la situación aportando sus
ideas y pensamientos para que puedan ser leídos por la sociedad, creando una
concienciación de la situación.
Ganivet, granadino de nacimiento fue
uno de los principales representantes del regeneracionismo en España, y
responsable de generalizar una gran crítica a la prensa. Afirmaba que el
periodismo escrito con grandes dotes de patriotismo, creaba una opinión pública
que no era la correcta, en la participación de España en la guerra
hispanoamericana del 98.
Cuando fue destinado a Helsinki,
escribió varias obras entre las que se encuentran Cartas Finlandesas (1896) o El porvenir de España (1898). Esta última es un ensayo,
donde se recogen cuatro cartas. Dos de ellas escritas por Miguel de Unamuno y
las otras dos por él mismo, recogidas
por el diario “El defensor de Granada”.
Gracias a este periódico, ambos se pueden leer y contestar, y así mostrar lo
que piensan y opinan de los diferentes problemas que tiene España y de su
situación.
En estos escritos se hablan de
las medidas que habría que tomar para “El
porvenir de España”, en respuesta a la gran crisis por la que está
atravesando el país. En estas reflexiones se habla del espíritu español,
haciendo un balance por la historia de la política tanto interior como
exterior, y las actividades que se están llevando a cabo por parte de las
autoridades que sin duda no son más las correctas. La situación por la que pasa
España, es un problema de carácter psicológico y fisiológico, que se pone de
manifiesto gracias a las reflexiones del vasco y del granadino de manera
intelectual.
Para ambos intelectuales es una
gran sorpresa poder hablar a través del diario después de tanto tiempo sin
hacerlo debido a la partida de Ganivet a Finlandia. La obra de Ganivet llamada Idearium español (1898) es un
ensayo que sin duda da un impulso de sinceridad, manteniendo el principio de la
verdad afirmando “en presencia de la
ruina espiritual de España hay que ponerse una piedra en el sitio donde
está el corazón y hay que arrojar aunque sea un millón de españoles a los
lobos, si no queremos arrojarnos todos a los puercos”.
El problema de Europa, es sin
duda para los autores sinónimo de miseria y pobreza para España. Unamuno, hace
especial hincapié en que se debe de soñar con el progreso, pero siempre
teniendo como prioridad el obrar bien en los actos del ciudadano. El continente
europeo, es centro de la humanidad que se muestra ejerciendo la violencia
frente a los demás pueblos. Los españoles están en contra de ideas y espíritus
que no son como los de ellos, y sin embargo su propia idea de nación aún no
está madurada. Ganivet por su parte afirma que, la idea de que “colonizar no es ir al negocio, sino civilizar pueblos y dar expansión
a las ideas”.
No es necesario salir de las
fronteras españolas para saber que el principal problema es de carácter
interno. La muerte de la nación española es evidente. Las diferencias entre
nación y patria para Unamuno son términos contrapuestos. Para explicar esta situación se hace un maravilloso
paralelismo con la obra de “El Quijote”,
donde se explica que al igual que el hidalgo, la nación española deberá morir
para renacer de nuevo con otros ideales y pensamientos de forma totalmente
rejuvenecida y así poder volver a su pleno juicio. Se muestra un simbolismo en
la humanidad del pueblo español. La mala situación que tiene el país hispano,
es sin duda por el carácter compulsivo y por no ver al país como una nación
unida. Unamuno tiene la misma idea respecto al territorio que el granadino, “España sigue permaneciendo inmutable a todo
lo referente de la subhistoria”.
La unión de los pueblos por vía
impositiva o legislativa es una manera errónea de que la nación permanezca
unida. En este punto es donde surgen los problemas con los catalanes y los
gallegos. La integración se debe dar entre elementos diferenciados, cada cual
se debe desarrollar a su modo y así habrá un mejor entendimiento. En el uso de
la lengua catalana, se argumenta que es mejor que los catalanes escriban en
catalán y sean los castellanos quienes lo traduzcan. Con esto el ciudadano
castellano se esfuerza por traducir una lengua que no es la suya y traducir un
pensamiento que le puede resultar extraño. El espíritu catalán debería penetrar
en el castellano y viceversa, con esto se evitarían las distancias entre ambos
idiomas y hablantes, el conocimiento de
lo ajeno es el mejor instrumento de conocer lo propio. Quien solo sabe su
lengua, no llega en momentos determinado a entenderla. Esta unión vuelve a
poner de manifiesto el regeneracionismo, donde se presencia la necesidad que
tiene el pueblo español por el progreso.
Ganivet, apuesta por el
movimiento regionalista. El valor que tienen los organismos políticos no
depende del Estado o la religión, sin duda tiene que ver con el carácter social
de las personas. El peligro está en las instituciones convencionales, por lo
que no entiende la existencia de socialistas en el Estado español. En este punto, ambos escritores entran en
contradicción, ya que Unamuno apuesta por una sólida alianza entre el
socialismo, el regionalismo y el antiguo carlismo.
En términos de nación, Ganivet
tiene una particular opinión acerca de los gobiernos, que es compartida por
Unamuno “hemos tenido periodos sin unidad
de carácter, un período hispano-romano, otro hispano-visigodo y otro hispano
árabe al que le seguirá un periodo hispano-europeo o hispano colonial”. El
programa político que escribe con Unamuno está al alcance de todos los
españoles. Se califica por parte de ambos como una pobre imitación que no
enseña nada de lo que conviene que sepan los españoles. El pasado y presente
sin duda, crean fuertes lazos con la América española. La cuestión cubana sin
duda ha sido económica. España no podía ser mercado para los productos de Cuba,
pero le abrió el mercado de los Estados Unidos con compensaciones bajas. Se afirma como se deberá de tener en cuenta la
puerta de África, lo que dará una gran apertura al exterior, fuera de las
tierras europeas.
Los dos factores radicales en la
vida de un pueblo son la economía y la religión. El régimen económico de la
propiedad y el sentimiento de la vida son las dos piedras fundamentales. La
salvación económica está en ser solidarios.
En el terreno de la religión,
Unamuno discrepa con Ganivet especialmente en la concepción española de la
cristianización, donde se hace una crítica a la Reforma juzgándola como injusta
confundiendo el dogma de la Concepción Inmaculada con el de la virginidad de la
madre de Jesús. Solo se conseguirá la justicia, si empleamos la paz. El
granadino ve el dogma como una idea española, que se refiera al pecado
original. Sin embargo, el cristianismo es otra de las bases que se está
oscureciendo, lo que no aporta una realidad evidente de la situación de la
nación.
Ganivet opina que para que la organización social cambie,
hay que cambiar las ideas. Para conseguir esto hay que emplearse menos en el
trabajo, meditar bastante y amar mucho. Teniendo siempre presente que lo
principal es luchar por el progreso y por la riqueza del territorio español. Al
margen de esto Europa, seguirá disfrutando de sus guerras territoriales, donde
la única riqueza que tienen los países son las armas de fuego y el empleo de la
fuerza.
Para conseguir el porvenir de
España, los ciudadanos deberán someterse a las exigencias europeas, sosteniendo
el país en la lucha contra las ideas de carácter corriente. Sin duda, Ganivet
apuesta por el rechazo a la sumisión de España, teniendo confianza en el país.
La crisis que tiene el territorio español, no conviene según el granadino que
se prolongue más.
Sin duda, mediante todas las
ideas propuestas a pesar de las discrepancias en algunos puntos de Ganivet y
Unamuno, se intenta dar una panorámica de lo que sucede en el territorio
español. Esto se consigue, valorando todos los aspectos que se encuentran
degradados y proponiendo cambios para conseguir el porvenir de país. Se da un
gran protagonismo al individuo, ya que el cambio debe empezar ahí. Cada
persona, deberá de tomar conciencia de lo que ocurre en el país para poder
llegar al cambio. Es en este punto, donde se hace una especial crítica al medio
de comunicación de la prensa. La influencia de la misma, en cada persona es de
un alto nivel, lo que le crea una mala visión de la participación de España en
la guerra cubana. Hay que apostar por la unidad de la nación. Solo de esta
manera, los intelectuales ponen las bases de un posible resurgir.
Finalizar con la frase de Ganivet:
“Hay muchos propagandistas que quieren
reformar España sin conocerla bien. Hay que atender a lo espiritual, íntimo,
subjetivo que garantice la organización tradicional”.
Fdo: Lorena Arribas Montero
Fdo: Lorena Arribas Montero
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